A sangre y Hielo...

El viernes pasado nos enfrentamos un amigo y yo en los Barrios Bajos de la ciudad con nuestras bandas. Por mi parte por fin podía manejar a las Viktorias por primera vez en solitario, mientras que enfrente una gran cantidad de criaturas de hielo eran comandadas por la poderosa Rasputina.

Entre callejuelas y plazas se iban a enfrentar dos bandas de carácter totalmente diferente, pues ante la movilidad y gran potencia en el cuerpo a cuerpo con notable fragilidad propia de las Viktorias, las gélidas criaturas de Rasputina combinan perfectamente robustez, resistencia y un poderoso potencial mágico a distancia. El encuentro fue casual, pues mientras los arcanistas se dirigían a sabotear un cargamento de mercancía del Gremio, los mercenarios volvían a sus dependencias tras unos entrenamientos en las afueras. Las Viktorias sabían que podrían sacar un buen dinero llevando a la siempre buscada Rasputina ante el Gremio , así que no dudaron en alzar armas contra ésta y sus gélidas criaturas. Por su parte Rasputina no pensaba dejar pruebas de su implicación en los actos de terrorismo callejero, así que no tenía más remedio que eliminarlos a todos.

Los objetivos eran:

-- Culto de Diciembre: Carnicería (matar más que el rival) como principal y Sabotaje como secundario.

-- Viktorias: el principal era controlar la mayor parte del terreno (Reconocimiento) y su secundario era el Asesinato de Rasputina.

Y las Bandas (30 piedras) estaban compuestas por:

-- Culto de Diciembre: Rasputina, Golem de Hielo, Esencia de Poder (totem), 3x Gamin y un Acólito de Diciembre.

-- Viktorias: las dos gemelas Viktorias, Taelor, Hamelin, Pistolera Convicta y una Ronin.


Comenzaron moviendo los mercenarios tomando posiciones tras uno de los edificios del centro, mientras que al mismo tiempo Rasputina y sus criaturas formaban un denso bloque en la calle esperando a que los primeros asomaran la cabeza para hincharlos a bolazos de nieve. Por supuesto los mercenarios no estaban por la labor pues se habían dejado las bufandas y manoplas en casa, así que se dividieron en tres frentes para asolar a los de Diciembre por todos lados: por la izquierda la Viktoria de las dos katanas y Hamelin, por el centro Taelor avanzando cubierta por la pistolera y por la derecha la Ronin junto a la Viktoria con pistola.

El movimiento táctico parecía funcionar perfectamente, pues las criaturas heladas apenas se movían, seguramente esperando alguna señal, la cual no tardaría en producirse pues de uno de los edificios en ruinas cercano donde había estado emboscado apareció el Acólito de Diciembre, sorprendiendo a todos en un rápido movimiento gracias al cual logró situarse en el montón de cajas y suministros para inmediatamente colocar un artefacto explosivo de baja potencia, aunque suficiente como para destrozar todas las mercancías.

Pese a que esta acción debería haber sido la señal para la ofensiva de los seguidores de Diciembre, fueron los mercenarios quienes estuvieron más rápidos, y en un arriesgado movimiento la Viktoria de las dos katanas se plantó en medio de la calle, invocando a su hermana a su lado, acercando a ésta al terrorista infiltrado. La respuesta de Rasputina no tardó en llegar y, potenciada por la presencia de la Esencia de Poder, comenzó a lanzar proyectiles helados hacia la gemela recién llegada, los cuales casi destrozan a la valerosa guerrera, la cual sólo puso salvarse mediante la protección otorgada por el sacrificio de preciosas Piedras de Alma. Naturalmente ésta no tenía intención de quedarse ni un segundo más a descubierto ante todo el poder de Rasputina, así que en una veloz carrera se plantó ante el Acólito, cortándole el paso para la huida a golpe de katana, hiriéndolo gravemente. Uno de los pequeños Gamin acudió al rescate, y entre los dos intentaron hacer frente a la Viktoria, pero ambos fallaron estrepitosamente.

Mientras tanto el Gólem iba de un lado a otro sin un objetivo fijo, sin saber si enfrentarse a la Ronin que amenazaba rodearles o si acudir al centro para reforzar la defensa. Rasputina congeló el edificio del centro, y las grandes pátinas de hielo resultantes hicieron imposible que Taelor y la Ronin pudieran moverse.

Hasta ahora Hamelin había pasado bastante desapercibido, siempre en retaguardia como si la acción no fuera con él, pero al final decidió sacar la flauta, con la cual hipnotizó a uno de los Gamin para que se acercase al edificio helado, al alcance del martillo rúnico de Taelor, quien no tardó en machacarlo en pequeños pedacitos. La siguiente en sentirse atraída por la dulce melodía del titiritero fue la propia Rasputina, quien inocentemente se acercó al centro, donde una verdadera lluvia de plomo proveniente de la pistolera convicta le dió la bienvenida.

Rasputina no tardó en retroceder a la seguridad de sus criaturas, quienes cerraron filas a su alrededor. Mientras tanto Viktoria pudo acabar con el Acólito de Diciembre en su feroz combate, aunque al hacerlo tuvo que dar la espalda al Gamin, quien estaba a punto de congelarle el culo cuando de nuevo pudo oírse la flauta de Hamelin, hipnotizando a la pequeña criatura helada para que se alejase del combate y saliera corriendo por las oscuras calles para no ser visto jamás.

Herida y con varios de sus seguidores muertos, destruidos o desaparecidos, Rasputina estaba contra las cuerdas y los mercenarios no dejaban de acosarla. A punto estaba de ordenar una ordenada retirada cuando, invocada por su hermana, la Viktoria de las dos katanas apareció a su lado. Los poderes defensivos de Rasputina inmediatamente hicieron frente a la nueva amenaza, casi congelando a la guerrera, pero la determinación de ésta era grande, así que con una serie de precisos movimientos puso fuera de combate a la maga y su tótem.

Desorientados por la pérdida de su creadora, el último de los Gamin y el Gólem de Hielo cargaron contra la aislada Ronin, hiriéndola levemente, pero no sin que ésta sajara al Gamin haciéndolo explotar en una lluvia de peligrosas esquirlas de hielo, las cuales dañaron tanto a la luchadora como al colosal Golem. El destino de la Ronin parecía sellado cuando la enorme criatura helada levantó sus hercúleos puños, pero justo un instante antes del impacto el filo de una katana emergió del pecho del titán, poniendo fin a la amenaza.

Aunque con serias heridas, las dos Viktorias reunieron a su banda en torno a la inconsciente Rasputina. Milagrosamente ninguno de los mercenarios había caído, y la recompensa por la captura de la arcana terrorista sería cuantiosa, aunque quién sabe, quizás sería más interesante hablar con Víctor Ramos, el jefe del Sindicato de Trabajadores y supuesto líder de los arcanistas; seguro que estaría interesado en hacerse cargo de la maga a cambio de unas cuantas Piedras de Alma...

Nostamal... pero seguro que el jugador que llevaba a Tina ese día se había dejado los guantes en casa, o había traído la baraja de su hermana pequeña (llena de barbies!!) o algo así...

Buen report y buena partida, parece...